En cierta forma, la publicidad ha existido desde hace mucho tiempo, ya que, el ser humano siempre ha hecho uso de estrategias para convencer a sus semejantes de las bondades de una idea o de un producto, a fin de atraer la atención y lograr adherentes o compradores.
Lo cual, en la era moderna, llegó al nivel de convertirse en toda una ciencia y una industria, enfocada en formas de comunicación, sea escrita, visual o auditiva, que permita promocionar algo. Sin duda su mayor desarrollo se alcanza aplicado a los ámbitos comercial y político.
Hoy, que transitamos por la sociedad de la información, con una enorme cantidad de medios de comunicación de diversa naturaleza y un bombardeo permanente de textos e imágenes, la publicidad está en su apogeo.
Se promociona todo tipo de productos, servicios o candidatos, empleando como base una gran cantidad de conocimientos científicos y tecnológicos. Se elaboran campañas publicitarias a partir del análisis de big data, definiendo gustos y tendencias, los cuales son dinámicamente influidos por las campañas publicitarias resultantes.
De tal forma que la publicidad tiene el poder de incidir en decisiones de todo tipo en la sociedad, impactando en la economía, la política y la sociedad en general.
Ese poder ha venido incrementándose, en la medida en que se dispone de nuevas y más poderosas tecnologías de comunicación, tanto analógicas como digitales. Desde los antiguos carteles publicitarios pegados en un muro, pasando por los folletos, periódicos y la propaganda televisada, hasta la Internet, con sus páginas Web, sus Pódcast y pare de contar.
Esta última posibilita lo que se denomina publicidad online, en contraposición a la publicidad offline. Pero, ¿Qué es exactamente la publicidad offline y qué formas asume en la práctica publicitaria moderna? Veamos todo lo relativo al respecto.
Publicidad offline y publicidad online
No hay duda de que estamos en un momento histórico donde lo digital avasalla la realidad, un enorme porcentaje de la humanidad está imbuido en el mundo de la internet y los teléfonos inteligentes.
A través de los ordenadores, smartphones, tablets y otros dispositivos conectados a la Internet, es decir en línea u online, recibimos todo tipo de información, una gran parte de ella es publicidad. En este sentido, publicidad online es toda aquella que llega al consumidor por alguna vía digital conectada a la red.
En tanto que, todas aquellas estrategias publicitarias que se apoyan en medios analógicos, no interactivos ni digitales, que están fuera del mundo de la Internet, se denominan publicidad offline, es decir, fuera de línea.
En pocas palabras, la publicidad offline es toda aquella que se basa en medios tradicionales, en el sentido de anteriores al mundo virtual o era digital.
Desde toda publicidad basada en medios impresos, como periódicos, revistas, carteles, volantes, folletos o rótulos luminosos, pasando por la publicidad auditiva en radio y la audiovisual en la televisión analógica o pantallas gigantes no en línea.
Ejemplos de publicidad offline y su relevancia actual
Aunque a la hora de planificar una campaña de marketing o campaña publicitaria, se priorizan las redes sociales y la Internet en general, no debemos desdeñar el valor de la publicidad offline.
Tengamos en cuenta que cada estrategia tiene un valor, según el target al que apuntamos, los recursos disponibles, el producto que aspiramos vender y las condiciones generales en las que se llevará a cabo la campaña.
Por ejemplo, si la idea o producto que aspiras a promocionar va dirigida a adultos mayores, posiblemente la radio, un anuncio en prensa o un folleto será un canal de comunicación más eficiente que un pódcast.
Por el contrario, si tu target son los jóvenes nativos digitales, no hay duda de que los canales offline son más limitados. Sin embargo, aun en este caso hay estrategias publicitarias offline que impactan en este segmento poblacional.
Los rótulos o anuncios callejeros
Desde los tradicionales carteles o vallas publicitarias impresas de formato gigante, pasando por los clásicos anuncios de neón, hasta las vallas con diseños de iluminación LED, estos rótulos callejeros llegan a automovilistas y transeúntes.
En algunos países y ciudades se les considera parte importante del pujante desarrollo comercial y, cuando son bien concebidos, constituyen un elemento resaltante de la decoración del entorno público, siendo atractivos a la vista.
Eso sí, en este medio la publicidad debe ser muy precisa e impactante para que cumpla su cometido.
Los folletos
Tal como puedes ver en https://www.galiciadigital.com/opinion/opinion.32474.php, los folletos publicitarios son una herramienta que ha superado el advenimiento de otros medios en la industria.
Este es un canal publicitario muy valioso para campañas de contacto directo con el consumidor. El folleto juega con los elementos visuales, táctiles y el carácter personal que implica la entrega de algo físico para ofrecerte una idea o producto.
Una vez en las manos del consumidor, es muy difícil que se resista a ojear ese atractivo material ilustrado, captando el mensaje que se le quiere hacer llegar.
Los anuncios televisivos
Si bien la televisión tradicional se ha visto en gran parte superada por la Internet y la televisión online, este medio aún llega a amplios segmentos poblacionales a nivel mundial. Puede llevarse a efecto mediante el patrocinio de programas, spot o microprogramas con fines publicitarios.
Sin embargo, se trata de un medio donde la publicidad es costosa, así que es sobre todo para productos o servicios de amplio consumo, que lo hagan rentable.
La radio
Por más que sea cierto que la radio ha sido desplazada por otros medios, primero por la TV y luego por los medios online, la realidad es que, en ciertas áreas y segmentos, no se puede eludir como un canal publicitario importante.
En muchos países y áreas pobladas de casi todo el mundo, la radio sigue siendo un medio de recepción de información fundamental.
Periódicos y revistas
Ten en cuenta que las personas que adquieren un periódico o revista en físico son gente que les gusta leer, lo cual marca un target mu particular. Esto posibilita anuncios más extensos y explicativos, que bien diseñados, pueden incidir efectivamente en este target.
Ventajas de la publicidad offline
En general, las estrategias offline de publicidad tienden a facilitar un acceso más directo y claro al consumidor.
Pensemos, por ejemplo, en la entrega personalizada de un folleto publicitario o en la percepción de un buen anuncio en un periódico o revista física de amplia tirada que el consumidor lee cómodamente en su hogar. Igualmente, en el impacto de una atractiva valla publicitaria en la vía pública.
Esto, en oposición a la dificultad que enfrenta la publicidad para hacer visible un producto en el abigarrado y extremadamente dinámico mundo del Internet.
Por otra parte, tal como asomamos anteriormente, la publicidad offline incrementa sus ventajas cuando se trata de ciertos segmentos de consumidores. Tal es el caso señalado de la radio en determinadas áreas rurales