Diferencia entre implante cementado y atornillado

La manera en que se colocan las restauraciones sobre implantes es un tema de discusión entre los expertos. Inicialmente, estas rehabilitaciones se fijaban mediante tornillos, pero con el crecimiento de la implantología y el interés de hacerla más accesible para los médicos generales, los fabricantes han desarrollado soluciones técnicas similares a las prótesis convencionales, conocidas como soluciones cementadas. Esta evolución ha ampliado las opciones disponibles y ha generado debate sobre cuál método es más adecuado en diferentes contextos clínicos.

1- Implante cementado

La técnica de unión conocida como cementación destaca como el método más comúnmente empleado en aplicaciones de implantes dentales. Algunas de las ventajas asociadas a esta técnica incluyen la ausencia de perforaciones para tornillos, la capacidad de tolerar implantes inclinados y su fácil instalación facilitada por la capa de cemento moldeable.

No obstante, es importante señalar una desventaja significativa de la cementación. El exceso de cemento que queda entre la corona y el tejido de la encía puede generar problemas periimplantarios en el futuro. Investigaciones y experiencias indican que la filtración de material cementoso hacia los espacios subgingivales, debido a la presión durante la colocación de la corona, puede ocasionar complicaciones gingivales en etapas posteriores. Por lo tanto, es esencial proceder con precaución al eliminar este exceso.

Considerando los datos recabados sobre los problemas periimplantarios vinculados a la técnica de cementación, algunas publicaciones recientes como la que podemos leer en ElPeriódicoDeAquí, sugieren la utilización prudente de este método en determinados casos. En consecuencia, se enfatiza la recomendación de que un profesional experto sea responsable de aplicar con cuidado la técnica de cementación.

2- Implante atornillado

El método de atornillado presenta la ventaja de ser fácil de ajustar para posibles modificaciones futuras. Por ejemplo, es más sencillo de retirar durante el mantenimiento o en situaciones que requieran intervención quirúrgica. La capacidad de ajustar el ángulo de fijación también contribuye a su facilidad de uso. Gracias a las innovaciones en esta técnica, como el reciente pilar ASC (canal de tornillo angulado) presentado por Nobel Biocare, ahora es posible trabajar con ángulos de hasta 25° para la entrada del tornillo.

Adicionalmente, la retención de tornillos implica menos componentes, lo que la hace más compacta. Al no utilizar cemento, se evita la irritación del tejido de las encías causada por exceso de material adhesivo. Aunque es importante señalar que, estéticamente, el agujero oclusal puede considerarse pequeño, pero puede ser considerado como una desventaja.

¿Cuál es la mejor opción para la reintervención?

A diferencia de lo que podrías pensar, las prótesis sobre implantes no duran para siempre y hay varios motivos que pueden llevar al dentista a desmontar una prótesis sobre implantes. Estos incluyen la fractura de cerámica, molestias para el paciente debido a sobrecontornos axiales, mantenimiento higiénico, cuidado de los dientes adyacentes y la sustitución de una prótesis implantológica existente por una más extensa, entre otros.

La prótesis atornillada resulta ser la opción más cómoda gracias al acceso al tornillo.

Algunos fabricantes ofrecen cementos de sellado específicamente diseñados para las prótesis sobre implantes cementados, los cuales tienen características que permiten, si es necesario, desprender fácilmente la prótesis del o de los pilares. Sin embargo, cabe preguntarse si el uso de este tipo de cemento también implica un riesgo de aflojamiento prematuro en la boca del paciente.

En consecuencia, es sensato afirmar que la reintervención en una prótesis sellada siempre es menos predecible que en una prótesis atornillada, especialmente cuando aumenta el número de pilares. Además, la comodidad proporcionada por la prótesis atornillada no solo se limita al proceso de desmontaje, sino que también se extiende a la facilidad de mantenimiento y cuidado a largo plazo.

¿Qué opción respeta mejor a los tejidos?

Cuando se cementa una prótesis sobre un implante, el mayor riesgo radica en que el cemento pueda penetrar demasiado en el surco. Si no se eliminan adecuadamente estos excesos, pueden representar una amenaza significativa para la salud de los tejidos blandos alrededor del implante y del hueso crestal.

La investigación ha dejado claro que la persistencia de residuos de cemento de cementación puede desencadenar mucositis y periimplantitis, problemas que afectan la salud de la zona periimplantaria. Aunque hay diversas técnicas para controlar el exceso de cemento sellador en prótesis sobre implantes, siempre existe el riesgo asociado.

Una alternativa muy beneficiosa es optar por una prótesis atornillada, ya que elimina por completo este riesgo. Además, esta opción ha demostrado ser una elección ventajosa según la literatura disponible.

¿Qué opción es la más económica?

Cuando fabricamos una prótesis en el laboratorio de manera cementada, podemos emplear un apilador mecanizado que se puede ajustar mediante sustracción. Este tipo de pilar suele ser más económico en comparación con un pilar anatómico obtenido a través de sobremoldeado o CAD/CAM.

La confección de una prótesis que se fija con tornillos implica necesariamente el uso de un pilar anatómico sobre el cual se coloca directamente el componente estético. Sin embargo, gracias al desarrollo actual de las técnicas CAD/CAM, se ha logrado eliminar progresivamente los tradicionales problemas relacionados con los costos. Las diferencias de precio, ahora bastante reducidas, están desapareciendo en comparación con otros criterios de selección. Este avance ha contribuido significativamente a superar las barreras económicas asociadas con la elección de métodos de fabricación de prótesis.

¿Cuál es la opción más sencilla?

La prótesis cementada implica realizar más pasos en el consultorio en comparación con la prótesis atornillada. Esto se debe a que la colocación del pilar, los controles radiológicos, la instalación de la estructura protésica y la eliminación completa del exceso de cemento aumentan significativamente el tiempo necesario para las manipulaciones clínicas, especialmente cuando la prótesis incluye varios pilares.

No obstante, la pasividad de la prótesis es uno de los criterios clave para el éxito en la implantación. Incluso aunque la prótesis atornillada sea un proceso más rápido, no se puede evitar la necesidad de realizar etapas de control de pasividad y corrección según sea necesario. Es esencial garantizar que la prótesis se ajuste perfectamente para lograr resultados óptimos en la implantación.

¿Qué implante es mejor, el cementado o atornillado?

Como te mencionaba, ambas formas de procedimiento tienen sus pros y contras. La literatura académica y diversas experiencias han dejado claro que la elección entre estas dos técnicas debe ser evaluada individualmente por un odontólogo especializado. Antes de tomar una decisión sobre el método a emplear, es crucial considerar los riesgos asociados con el entorno periimplantario, teniendo en cuenta la ubicación específica de la corona (ya sea en la parte frontal, posterior, superior o inferior) y factores estéticos. También es esencial tener en cuenta la recuperación del paciente.

En el caso del tratamiento de un solo diente, el método del tornillo puede presentar problemas técnicos, mientras que la técnica del cemento puede tener implicaciones biológicas. Los pilares dinámicos y los ASC ofrecen una mayor facilidad de uso, especialmente en el área estética frontal. Además, se prefiere especialmente la retención de tornillos en tratamientos que involucran implantes de arco. Cabe mencionar que el uso de la técnica del cemento se refiere a la cementación en lugar de la sellada, ya que este último término podría generar confusión en el contexto dental.